Presentación del número 1 de la Colección de Poesía ALAS


Encarna López Navarro presentó el acto en representación de ALAS


DISCURSO DE PILAR ORIENTE GUARIDO, COORDINADORA DEL INSTITUTO ANDALUZ DE LA MUJER DE MÁLAGA


PRESENTACIÓN DE LA ANTOLOGÍA DE
AURORA GÁMEZ ENRÍQUEZ
19 de Mayo de 2009






Buenas tardes.
Gracias por vuestra presencia aquí, en una tarde dedicada al pensamiento, la palabra, el arte y la música.
Como representante del Instituto Andaluz de la Mujer, tengo la satisfacción de presentar esta “Antología” de Aurora Gámez Enríquez, que constituye el número uno de la Colección de Poesías ALAS.
Gracias a la Asociación de Mujeres por la Literatura y las Artes, ALAS, por esta nueva colección.
Gracias a ti, Aurora, por tu palabra que nos nombra.
Gracias a Javier Gámez Gámez por haber realizado estas bellísimas ilustraciones y por el cuidado y diseño de la edición.
Gracias a Mercedes Peña Lucena, que ha prologado esta “Colección de piezas escogidas” de Aurora.
Gracias a Rafael Sánchez Rando, que nos acompaña con su música.
Hace 10 años, en unas fechas aproximadas, iniciaba su andadura la Asociación ALAS.
Aurora, su fundadora, y un numeroso grupo de escritoras y artistas malagueñas emprendían así un camino de sororidad y empoderamiento.
Su primera actividad, “@las para el Arte”, fue sembrando nuestra provincia con palabras pensadas y escritas por mujeres.
Estas “amigas aladas”, escritoras, pensadoras y artistas, extienden su obra más allá de las publicaciones y exposiciones, desplegándose en la red para que las encuentren quienes buscan otra forma de ser y de estar en el mundo.
A través de Internet expresan su voluntad de liderar un movimiento moderno de escritoras y artistas que tomen la palabra y creen un lenguaje que nos nombre.
Alas para el pensamiento.
Alas para la escritura.
Alas para el arte.
Alas y Aurora…
¿Qué decir de Aurora?
Aurora, ante todo, ama. Ama la vida, ama la sabiduría, el pensamiento. Ama su Valle del Azahar. Sus sonidos, sus olores, sus colores, sus flores.
Aurora ama, reconoce, aprende, concilia y vive.
Y le da por creer que se pueden cambiar las cosas. Y emprende la tarea de decir a esta sociedad que hay que ir cambiando tanta desigualdad desde los cimientos. Y se pone manos a la obra haciendo lo que le gusta: educar y escribir.
Me vas a permitir, Aurora que te dedique unas palabras de nuestra genial María Zambrano

“Nace la poesía cuando la palabra se hace necesaria para hacer y para establecer”.
(María Zambrano)

Ahora, más que nunca, es necesaria la palabra.
Necesitamos una palabra que se haga memoria, que rescate lo semejante y lo diverso, que traiga al presente nombres, hechos, pensamientos, obras y vidas que han permanecido ocultas en esas páginas que la historia no cuenta. Mujeres que han sido, que son, que serán.
Necesitamos que las palabras de llanto se conviertan en clamor frente al silencio cómplice y frente a la violencia que mata la autoestima, el desarrollo personal, la esperanza y la vida.
Necesitamos recrear palabras para definirnos a nosotras mismas, con nuestras semejanzas y con nuestras diferencias. Palabras para nuestra identidad, más allá de estereotipos, costumbres, tradiciones o creencias. Palabras para romper y palabras para construir. Palabras que no opriman ni sometan, que sean verdaderas, pero no inmutables.
Necesitamos palabras para conjurar la realidad, no siempre definible, y palabras para establecer un vivir diferente. Palabras que propongan caminos singulares.
Y necesitamos unir palabras en formas nuevas, para abrir esos espacios hasta ahora inaccesibles y para sembrar nuestras búsquedas con hitos de libertad.
Las mujeres necesitamos palabras que establezcan presencia. Palabras para participar. Y palabras para decidir.
Tal vez necesitemos una sola palabra que perdure en el tiempo. O muchas. O todas.
Gracias, Aurora, por ofrecernos tu palabra.


Málaga, 19 de Mayo de 2009
Pilar Oriente Guarido
Coordinadora Provincial del Instituto Andaluz de la Mujer

PRÓLOGO DE MERCEDES PEÑA LUCENA

PRÓLOGO

Inteligencia, dame, el nombre exacto de las cosas, clamaba Juan Ramón Jiménez. Por ello, y aunque ya se ha convertido en un tópico, he recurrido al DRAE para comenzar este prólogo con la definición de “antología”: (Del gr. “άνθολογία”; de “άνθος”, flor y “λέγω”, escoger). Colección de piezas escogidas de literatura, música, etc.║ de antología. loc. adj. fig. Digno de ser destacado, extraordinario. Diccionario de la lengua española. RAE. Vigésimo primera edición.

Sin duda, esta colección de poemas ha recibido justa y merecidamente el apelativo: POESÍA y VIDA conforman estas páginas.

Una VIDA que se abre a la universalidad de la mujer de todos los continentes, que pinta sus sinos y esclavitudes, sus logros y fracasos desde el nacimiento hasta la muerte; que bebe de las raíces ancestrales de la cultura griega (alfabeto y mitología) y se adorna con el sensualismo del léxico arábigo-andaluz.

Leer estas páginas es reconocerte, AURORA, en ellas y recorrer juntas un sendero que comenzaste posando tu mirada añil, como el horizonte, llena de ternura sobre tu familia (abuelos y sobrinos) y tu pueblo: su río (el Nacimiento), sus árboles y flores, sus olores, sus calles, sus fiestas populares, el quehacer sencillo de sus gentes…

Leer, AURORA, estas páginas es reconocerte en esa mujer renovada que contempla serena el mar desde su balcón, se ensimisma con las palomas, se funde con el horizonte, se hace eco de campanas y sublima lo cotidiano mojando la galleta en el café.

Leer estas páginas, AURORA, es reconocerte como la luchadora incansable que siempre has sido. Libertad, justicia, mujer y lenguaje: tus campos de batalla. Tus armas: la acción social y, muy especialmente, lo cultural; porque no te has conformado con el avance de los tiempos, sino que has querido tú misma impulsar y promover esos cambios. Has deseado con todas tus fuerzas que el idioma, al que tanto amas, empodere a la mujer, la haga presente en numerosas realidades y contextos. Pero, además, no has consentido que el ímpetu y anhelo por lo futuro borre el pasado, derrochando gratitud y otorgando homenajes a las adolescentes con mejor expediente y a la mujer rural: heroína silenciosa en medio de las tareas domésticas, sencilla, fuerte, sometida y grande.
Leer estas páginas y reconocerte, AURORA, como la poeta que gusta del lenguaje exacto, que lo transgrede para que relumbren sus sentimientos, luz frente a sombras; que se descubre en el verso libre, los romances, las seguidillas y el soneto, con un estilo en el que predomina lo sustantivo como esencia del alma femenina, que escudriña en su interior, dejando que afloren el amor, la soledad y la nostalgia. Tus versos breves sugieren y la condensación de muchos de ellos deja alada la imaginación.

Así que suspendida en tu mundo interior, que no es sino reflejo de nuestro mundo, no me queda más que darte doblemente las GRACIAS. Primero, por tu poesía y segundo, por haber confiado en mí y haberme brindado la oportunidad de compartir el proceso apasionante y delicado de preparación de esta bella antología; de releer y paladear tus versos en estas tardes otoñales y de consentir, que desde la amistad sincera, te imite y homenajee con tan sólo cuatro palabras:

Poeta, ELLA. Mujer, ELLA.





MERCEDES PEÑA LUCENA

LICENCIADA EN FILOLOGÍA HISPÁNICA
PROFESORA DE LENGUA Y LITERATURA EN EL
IES LOS MONTECILLOS DE COÍN (MÁLAGA)




La Asociación de Mujeres por la Literatura y la Artes “ALAS” se constituyó en Málaga en 1999 con la finalidad de “empoderar a las mujeres escritoras y artistas” e “investigar la obra de las mujeres y difundir su contribución y/o exclusión en el arte universal”[1]. La creación de dicha asociación, de vocación internacional, así como de cualquier congreso, acto, seminario, etc., a favor del desarrollo de la actividad artística femenina queda de sobra justificada tras detectar la dificultad individual de las artistas para el desarrollo de su actividad y, sobretodo, por la justa necesidad de recuperar la memoria de las mujeres que, al formar parte de movimientos socioculturales y grupos artísticos de relevancia, han dejado un tremendo rastro de dificultades y de olvidos injustamente merecidos. Más recientemente las actuales generaciones hemos tenido constancia de que, como afirma Marián L. F. Cao “La postmodernidad nos descubrió –entre la nostalgia de unos y el júbilo de otras y otros- la muerte de un supuesto sujeto universal, y nos descubrió curiosamente, que el que agonizaba no era universal. El sujeto que comenzó a independizarse en el Renacimiento como ser autónomo, dueño de su destino y demiurgo de su futuro, hacedor personal sin limitaciones e impulsor del llamado progreso moderno, era un sujeto blanco, masculino, heterosexual y occidental”[2]. Por esta causa muchas mujeres han pagado un alto precio al haberse involucrado en los movimientos socioculturales de vanguardia, marcados, en muchos casos, por un alto componente misógino.



Inmaculada García Haro,
es Licenciada en Historia del Arte por la Universidad de Málaga , escritora y socia fundadora de ALAS

[1] Estatutos de la Asociación de Mujeres para la Literatura y las Artes “ALAS”. Registro Nacional de Asociaciones (HOJA REGISTRAL Nº 165020)
[2]L.F. Cao, M. “Creación Artística y Mujeres” NARCEA, S. A. DE EDICIONES (2000)











Ilustraciones y cuidado del libro a cargo de JAVIER GÁMEZ GÁMEZ


Javier es mi hijo, el mejor regalo que me ha podido hacer la vida.

Presidenta de ALAS



Ilustraciones y cuidado del libro a cargo de JAVIER GÁMEZ GÁMEZ


paréntesis -portada-


Dedicado a María Teresa y Sebastián David Wang Gámez


haiku


palabra de honor

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seguidilla castellana






COLOFÓN









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